Que puede comer mi hijo (a) después de una cirugía?

Consejos prácticos de alimentación después de una intervención quirúrgica en pacientes pediátricos.

Dr. Abdi Oliva

11/12/20253 min read

a baby eating broccoli
a baby eating broccoli

Después de una cirugía, uno de los temas que más preocupa a los papás es la alimentación. Es normal preguntarse qué puede comer el niño, qué alimentos evitar y cómo ayudarlo a recuperar el apetito.
En este artículo, les comparto consejos sencillos y seguros para cuidar la nutrición de tu hijo durante su recuperación.

👶 1. Empieza poco a poco

Después de la anestesia, algunos niños pueden tener náuseas o poco apetito. No te preocupes, es totalmente normal.
Lo más importante es empezar con líquidos claros (agua, té suave, suero oral o caldito) y avanzar gradualmente según lo que indique el médico.

➡️ Consejo: no obligues a comer. Permite que el niño acepte los alimentos a su ritmo.

🍎 2. Opta por comidas suaves y fáciles de digerir

Cuando el médico autorice reiniciar la alimentación sólida, elige opciones blandas y ligeras, como:

  • Puré de papa, zanahoria o calabaza.

  • Arroz cocido o sopa de fideos.

  • Pollo o pescado desmenuzado.

  • Frutas cocidas o compotas.

Evita los alimentos grasos, picantes o muy condimentados, ya que pueden irritar el estómago o retrasar la digestión.

🍼 3. Hidrátalo bien

La hidratación es clave en la recuperación. Ofrécele agua, agua de coco, caldos o suero de rehidratación.
Si tu hijo está lactando, la leche materna puede y debe continuar, salvo que el médico indique lo contrario.

🩺 4. En cirugías abdominales, evita alimentos que causen estreñimiento

En las cirugías abdominales (como apendicitis, hernia o intestino), el sistema digestivo necesita más tiempo para recuperarse.
Durante este periodo, evita los alimentos que puedan causar estreñimiento, como:

  • Pan blanco, arroz refinado y plátano.

  • Quesos maduros o alimentos con mucha grasa.

  • Embutidos o comidas procesadas.

Prefiere alimentos ricos en fibra y agua, como papaya, pera, ciruela, calabaza cocida o avena.
Esto ayuda a que tu hijo evacúe con facilidad, sin hacer esfuerzo, cuidando así su herida interna.

🍗 5. Incluye alimentos ricos en proteínas para una mejor cicatrización

Durante la recuperación, el cuerpo necesita más proteínas para regenerar los tejidos y cicatrizar la herida quirúrgica.
Agrega a la dieta:

  • Pollo, pescado o huevo (bien cocido).

  • Yogur o leche baja en grasa (si están permitidos).

  • Frijoles, lentejas o garbanzos (excepto cirugía abdominal, provocan distención)

  • Queso fresco o requesón.

Estas proteínas ayudan a reparar los tejidos y fortalecer el sistema inmunológico. Además, combinarlas con frutas y verduras ricas en vitamina C (como naranja, guayaba o kiwi) mejora aún más la cicatrización.

🚫 6. No creas en los mitos sobre “alimentos prohibidos”

Es común escuchar que después de una cirugía no se pueden comer huevos, pescado, cerdo o frijoles porque “causan infección” o “dejan mala cicatriz”.
👉 Esto es un mito.
No existe evidencia científica que relacione estos alimentos con una mala cicatrización o complicaciones.
Al contrario, muchos de ellos (como el huevo o el pescado) aportan proteínas de alta calidad que ayudan a sanar mejor y más rápido.

Si el cirujano o el pediatra no ha indicado alguna restricción específica, no hay razón para eliminar alimentos nutritivos.

🍞 7. Ofrece porciones pequeñas y frecuentes

Después de una cirugía, el estómago del niño puede estar más sensible. En lugar de tres comidas grandes, ofrece pequeñas porciones varias veces al día.
Esto ayuda a mantener la energía sin forzar el sistema digestivo.

8. Mantén una actitud positiva

Comer también tiene un componente emocional. Si te muestras tranquilo y alegre, tu hijo se sentirá más animado a comer.
Convierte la hora de la comida en un momento agradable, sin presiones.

En resumen

Después de una cirugía, la alimentación de los niños debe ser suave, progresiva y rica en proteínas.
Si la cirugía fue abdominal, evita los alimentos que causan estreñimiento y prioriza opciones con fibra y buena hidratación.
Recuerda que los mitos sobre “comidas prohibidas” no tienen base médica: una dieta equilibrada y variada es la mejor aliada para la recuperación.

Con paciencia, cariño y siguiendo las indicaciones del cirujano pediatra, tu hijo volverá a sentirse bien muy pronto.

Dr. Abdi Oliva García
Cirujano Pediatra en Cancún
Atención quirúrgica especializada en bebés, niños y adolescentes.
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